En el IES Valle del Azahar de Estación de Cártama (Málaga), iniciamos por primera vez esta aventura de RetoTECH con alumnado muy motivado en el proyecto y profesores dispuestos a ayudarles en todo lo posible para conseguir sus objetivos.
Esta andadura en RetoTECH la iniciamos con ilusión y también con sentido de la responsabilidad, ya que somos conscientes de lo mucho que han trabajado en otros centros en todas las ediciones anteriores, por tanto, nosotros como “novatos” en esta experiencia consideramos que será toda una experiencia poder participar en la feria donde se mostrarán los proyectos finales.
Nuestro proyecto atiende a las necesidades de nuestro centro, en el que somos conscientes de que hay muchas aspectos que mejorar y, además, existe una preocupación general por la mejora de las condiciones en nuestro instituto relacionadas con el reciclaje. De hecho, hemos estado participando durante dos cursos académicos en un programa Erasmus+ con otros cuatro países en los que hemos reflexionado mucho acerca del reciclaje de residuos que se producen en los propios centros educativos.
¿Sería una buena idea proyectar físicamente una solución a los problemas de reciclaje que tenemos en nuestro centro y así concienciar al alumnado de la importancia de generar los menos residuos posibles? A esta pregunta respondemos con un rotundo sí y esa es la línea en la que queremos trabajar en nuestro proyecto para presentarlo en la feria de RetoTECH.
El reto no es fácil para nosotros, es la primera vez que abordamos un problema de estas características con ambición, pero todos y todas las implicadas en este proyecto queremos dar lo mejor de nosotros mismos para conseguirlo.
Una vez definida la necesidad que queremos solventar, seguimos con el siguiente paso del método de proyecto buscando ideas. Hemos realizado una lluvia de ideas en la que el alumnado ha propuesto muchas soluciones al problema del reciclaje de residuos generados en nuestro centro. Algunas ideas, magníficas por cierto, por tiempo y por presupuesto son complicadas de realizar en estos momentos y no podemos olvidar que debemos ir paso a paso, comenzando desde cero, ya que no partimos de un proyecto realizado previamente.
Tras muchas conversaciones en las que hemos expuesto nuestras ideas, hemos llegado a un acuerdo acerca de nuestra “máquina para reciclar” y hemos realizado un diagrama en el que se presentan las características principales de esa máquina que queremos que funcione en nuestro centro.
Queda lo más complicado, construir esa máquina y que funcione. ¡Vamos a ello!
