Llegó el momento culminante donde pudimos encontrarnos con los otros centros participantes y compartir nuestros proyectos, fruto de la ilusión y trabajo de los meses previos. Ahora, a la vista de los resultados, se puede concluir que ha merecido la pena. Hemos progresado mucho, hemos aprendido a diseñar, crear y exponer. Hemos hecho nuevas amistades en este camino de la enseñanza-aprendizaje. Y tenemos ganas de seguir avanzando.
Gracias a la Fundación Endesa, los responsables del Programa Retotech, y el equipo de Bitbloq, por hacer posible esta enriquecedora experiencia.